domingo, 16 de agosto de 2015

Película: Hwayi, el niño monstruo

Buscando en una página para descargar dramas y películas coreanas, me encontré con una que desde hace tiempo me llamó la atención porque el protagonista es el joven, Yeo Ji Woo, de I Miss You, que interpretó a Han Jeong Woo de joven. Leí su sinopsis y captó mi interés, pasó un tiempo para conseguir descargarla. Es una excelente historia con excelente reparto.

Les cuento:
Trata sobre un niño que es criado por cinco hombres que son considerados como padres, él no recuerda que fue raptado por dichos “padres”, por lo tanto éstos le enseñan sus habilidades en el arte del asesinato, defensa, entre otros.
Un día, entran en una casa que no quiere ser desalojada por una pareja, todo empieza a ir mal cuando Hwayi, ese es el nombre que le dan sus padres, descubre que está la señora de la casa y decide hacer como si no vio nada, la señora en cuestión le llama a su esposo, quien ha salido a trabajar y le dice que regrese, que hay alguien en la casa… los padres de Hwayi entran a la casa, regresa el esposo de la señora y se encuentra con los intrusos en su casa.
Los padres de Hwayi, hacen que él le dispare al señor, la señora huye... Hwayi toma una foto de un niño, y este acontecimiento, es el gatillo que disparará una venganza contra sus padres, con todo lo aprendido de ellos, todo debido a la relación que guarda el crimen con él.

Debo decir que este joven actor me dejó sin palabras, su actuación es una maravilla, tiene un excelente futuro, para mí, si tuviera unos 24 años, desplazaría a ciertos actores populares, este niño lo he visto reír tiernamente y llorar desconsoladamente. Tiene un carisma y talento impresionante, será el futuro rompecorazones, o ya tal vez lo es.

Ver a este joven con 15 años, en ese momento, actuar en una película de este calibre dice mucho de él, ¡¡Wow!! Una reverencia de 90° grados se merece.

Me dio cosita que  lo obligaran a ser lo que no quería, claro, más adelante es su decisión.
Su tío experto en conducción realmente quería su bien…
Recuerden tener su cajita de pañuelos.

El niño fue la perdición de ellos.




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